Cada 25 de septiembre se celebra el Día de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), una fecha que busca recordar el compromiso mundial asumido en 2015 por los Estados Miembros de las Naciones Unidas al aprobar la Agenda 2030, un plan común para erradicar la pobreza, proteger el planeta y garantizar que todas las personas vivan en paz y prosperidad.

Los 17 ODS abarcan temas como la acción climática, la igualdad de género, el trabajo decente, la educación de calidad y la reducción de desigualdades. Constituyen una hoja de ruta que integra lo social, lo económico y lo ambiental, y que requiere del esfuerzo conjunto de gobiernos, empresas, organizaciones y ciudadanía.

Este año la conmemoración adquiere un sentido especial: faltan solo cinco años para 2030, la meta establecida para cumplir con los ODS. Esto nos invita a reflexionar sobre los avances alcanzados, pero también sobre los desafíos pendientes, y a redoblar esfuerzos para acelerar la transformación hacia un mundo más justo, inclusivo y sostenible.

El Día de los ODS no es solo una efeméride, sino un llamado urgente a la acción colectiva. Cada decisión individual y cada iniciativa institucional pueden marcar la diferencia para construir el futuro que queremos y necesitamos.